Publicidad

Alteraciones en la biodistribución de los radiofármacos causadas por interacciones medicamentosas

Introducción

En el desarrollo de cualquier técnica de Medicina Nuclear, tanto diagnóstica como terapéutica, además del conocimiento de los mecanismos de acción de los radiofármacos empleados, es necesario tener presente las posibles interacciones medicamentosas que puedan dar lugar a alteraciones en la biodistribución. Normalmente, estas interferencias provocan un aumento o una disminución de la captación del radiofármaco por parte del órgano o tejido diana, pudiendo incluso dar lugar a falsos positivos o negativos. En cualquier caso, el desconocimiento por parte del especialista en Medicina Nuclear, de los efectos de la medicación del paciente sobre la biodistribución del radiofármaco, podría conducir a un diagnóstico erróneo.

Según el Real Decreto 1345/2007, por el que se regula en España el procedimiento de autorización, registro y condiciones de dispensación de los medicamentos de uso humano fabricados industrialmente, los radiofármacos deben someterse a un procedimiento de evaluación y registro por parte de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios y se autorizan para las condiciones de uso especificadas en el resumen de las Características del Producto o Ficha Técnica, donde deben documentarse las interacciones con otros medicamentos.

Si el radiofármaco es de uso terapéutico, en general las posibles interacciones medicamentosas se encuentran más ampliamente estudiadas, ya que en estos casos la alteración de la distribución in vivo del radiotrazador supone la irradiación no deseada con emisores beta de alta energía. Un ejemplo conocido es el empleo de 131I-yoduro sódico para el tratamiento de cáncer de tiroides o de hipertiroidismo, en el que está bien establecido los fármacos que el paciente debe suprimir e incluso el periodo de tiempo en el que debe hacerlo, antes del tratamiento con el radioisótopo.

Los fármacos pueden interferir en los procedimientos diagnósticos o terapéuticos por numerosos mecanismos. En algunas ocasiones, alteran directamente la identidad química del radiofármaco, mientras que en otras afectan al estado fisiológico del órgano diana. Aunque el efecto toxicológico causado por el fármaco no es una interacción propiamente dicha, es importante conocerlo para identificar la posible causa de una captación atípica. Si se conocen las interacciones medicamentosas con radiofármacos y las mismas se encuentran convenientemente categorizadas(1), es posible distinguir si la biodistribución anormal de un trazador se debe a una alteración del órgano diana causada por la medicación, a una interacción in vivo genuina entre el radiofármaco y el fármaco, a un daño inducido por la medicación del paciente o simplemente a una interacción entre el radiofármaco y los catéteres o jeringas empleados en la inyección.

Existen muchas clasificaciones propuestas para estas interacciones; una de las más extendidas las agrupa en cuatro categorías: farmacológicas, toxicológicas, farmacocinéticas y físico-químicas. Aunque estas categorías no están claramente definidas y además una misma interacción puede estar determinada por más de un mecanismo, se pueden describir de la siguiente manera(2):

  1. Interferencias farmacológicas. El efecto farmacológico es tan acusado que interfiere en la vía de transporte del radiofármaco hacia el órgano diana. Es, por ejemplo, el caso de los analgésicos narcóticos en un estudio de vías biliares, que provocan un patrón semejante a una obstrucción del conducto biliar por un retraso en el tránsito del radiofármaco desde la vía biliar al intestino.
  2. Interferencias toxicológicas. El fármaco ejerce un efecto tóxico en el órgano de interés, de forma que modifica la captación del radiotrazador. Uno de cada 10 pacientes en tratamiento farmacológico presenta toxicidad provocada por algún fármaco; un ejemplo de este tipo de interferencia es la nefrotoxicidad causada por algunos antibióticos que provoca un aumento inusual de la captación por parte de los riñones. Algunas de estas interferencias se han utilizado para determinar la nefrotoxicidad de algunos fármacos como la ciclosporina-A en estudios realizados en animales, que demuestran la alteración en la biodistribución del 99mTc-mercaptoacetiltriglicina o MAG-3(3) .
  3. Interferencias farmacocinéticas. El mecanismo específico del fármaco interfiere en la captación y la excreción del radiotrazador. Por ejemplo, la captación de galio-67 observado en las mamas de pacientes en tratamiento con fármacos que inducen la síntesis de prolactina, tales como la metoclopramida y clorpromacina.
  4. Interferencias físico-químicas. e produce una interacción directa entre el trazador y el fármaco, creándose uno o más focos de actividad inesperados. A este grupo pertenece una de las interacciones de mayor incidencia: la quelación por sales de hierro (en tratamientos de larga duración) con radiofármacos tecneciados. Estos complejos son retirados por las células de Kupffer del hígado, visualizándose este órgano en la imagen.

Por la importancia del tema y su utilidad como herramienta de trabajo, es necesaria la difusión y el seguimiento de las interacciones detectadas en los distintos servicios de Medicina Nuclear. Para ello se requiere una estrecha colaboración entre el médico nuclear, que detecta una imagen anómala o inesperada, y el radiofarmacéutico, que investiga las posibles causas. Como no es posible que todas las interferencias se encuentren documentadas en la ficha técnica del producto, debería adquirirse la práctica de comunicarlas al laboratorio productor del radiofármaco y al Comité de Radiofarmacéuticos de la Sociedad Europea de Medicina Nuclear, para la elaboración de una base de datos sobre potenciales interferencias y su difusión en el informe anual que se publica en el European Journal of Nuclear Medicine and Molecular Imaging.

El objetivo de este trabajo es reunir las interacciones medicamentosas con radiofármacos documentadas en la literatura en una guía, que sirva como instrumento de consulta útil y de fácil manejo para la práctica clínica diaria del especialista en Medicina Nuclear. La guía se ha estructurado en apartados según la prueba afectada y el radiofármaco empleado. Cada apartado incluye una tabla con los fármacos causantes de la interacción, el efecto sobre dicha prueba y el mecanismo de interacción, en caso de que el mismo sea conocido.