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Gammagrafía con 99mTc-sestamibi en hiperparatiroidismo con diagnóstico histológico de carcinoma de paratiroides

Introducción

El carcinoma de paratiroides (CP) es una neoplasia endocrina muy poco frecuente, reportada por primera vez por De Quervain en 1909(1). Posteriormente, fue Armstrong en 1938 quien describió su asociación con la hipercalcemia severa(2). Este tumor representa menos del 1% de todos los hiperparatiroidismos primarios (HPP) y se caracteriza por presentar niveles plasmáticosde calcio muy elevados (3-4 mg/dl por encima del límite superior de normalidad) y cifras de hormona paratiroidea (PTH) hasta cinco veces por encima del valor normal. Suele presentarse en la quinta década de la vida, sin predominio de género. Su etiología no es bien conocida, existiendo formas esporádicas y familiares como la neoplasia endócrina múltiple tipo I (MEN-1), el síndrome de hiperparatiroidismo hereditario y el tumor de mandíbula(3). La presentación clínica típica es aquella secundaria a una hipercalcemia severa: debilidad (88%), poliuria y/o polidipsia (22-38%), artromialgias (27%), pérdida de peso (17%) y con frecuencia variable, anorexia, náuseas, vómitos, estreñimiento y dolores óseos. Los órganos más afectados son el riñón (nefrolitiasis en un 32-70%, insuficiencia renal hasta en un 84%) y el hueso, con manifestaciones óseas en un 41-91%. Más del 95% de los pacientes presentan síntomas al momento del diagnóstico, si bien hasta un 2-7% cursan de forma asintomática, siendo estos muy difícil de diferenciar del HPP de causa benigna(4). El diagnóstico definitivo solo es posible mediante el análisis histopatológico de la glándula paratiroides resecada, ya que la punción de aspiración con aguja fina y la biopsia no se recomiendan por el riesgo de diseminación del tumor(3,4).