La imagen FDG-PET del proceso inflamatorio ha demostrado ser muy útil en la evaluación de la aterosclerosis, en especial de la placa vulnerable, pero los investigadores aún no han llegado a un consenso sobre el protocolo más adecuado para esta técnica de imagen molecular.

PaulineHuet, PhD, de la Universidad de Paris Sud, Orsay, Francia, y un equipo de investigadores han dado un paso más hacia la estandarización del método. La clave, según un meta-análisis de 49 estudios previos publicado 28 de febrero en el Journal of Nuclear Medicine, está en utilizar sistemas PET de elevada resolución espacial y métodos avanzados de corrección del volumen parcial. Los investigadores encontraron 46 métodos de cuantificación de la lesión, 51 protocolos de reconstrucción y 53 métodos de adquisición distintos en tan solo 49 artículos revisados de la literatura.Hubo varios factores de confusión que hacen muy difícil evaluar con precisión muchos, si no la mayoría, de los estudios; un factor importante fue el descuido de los investigadores para documentar en sus reportes la resolución espacial de sus equipos y los tamaños de voxel.

"Algunos parámetros clave como la resolución espacial y el tamaño del voxel ni siquiera se mencionan en casi el 70% de los artículos", señalanHuet y colegas. "Esta falta de una comunicación adecuada ha impedido una comparación sólida de los resultados, dado que la resolución y tamaño delvoxelinfluyen significativamente en el efecto de volumen parcial y alteran las medidas de lesiones pequeñas como las placas ateroscleróticas. Por último, los protocolos afectan de modo muy variado los parámetros utilizados para evaluar la gravedad de la enfermedad; esta gran variabilidad muestra una falta de consenso en cuanto a qué parámetro se debe medir y cómo debe esto hacerse".

Había muy amplia variabilidad en los protocolos de adquisición utilizados para evaluar las placas arteriales. Los investigadores descubrieron que en 15 de los 49 artículos analizados, la exploración PET original fue realizada con fines oncológicos y solamente más tarde fue reevaluada con enfoque en la aterosclerosis. La variabilidad también fue la norma respecto a los protocolos de reconstrucción utilizados. La mitad de los estudios reportó la aplicación de un algoritmo de reconstrucción iterativa, pero un tercio no informó qué tipo de algoritmo se utilizó.

"Una vez más, estas diferencias podrían deberse al hecho de que parte de los estudios fueron diseñados inicialmente para imagenología tumoral, por lo que no necesariamente fue utilizado un protocolo adecuado para la cuantificación exacta de lesiones subcentimétricas", escribieron los investigadores.

Alrededor del 89% de los estudios indica el valor estándar de captación (SUV) y la relación entre el objeto blanco y el fondo, pero persistió variabilidad en la forma en que se midieron estos parámetros. Mediciones de precisión y las definiciones claras aparecen en sólo el 10% de los estudios y un triste 6% de los estudios proporciona medidas que revelan la extensión de la aterosclerosis al proporcionar datos de diferentes regiones.

Lo que parece claro es que esta técnica de imagen molecular prometedora requiere gran cuidado y precisión, no sólo en la evaluación de pacientes con aterosclerosis, sino también en la presentación de datos para estudios futuros. Las imágenes de la aterosclerosis con FDG pueden aún llegar a ser un buen candidato para el PET / MR.

"Los protocolos PET-RM podrían mejorar sustancialmente la aplicación de correcciones de volumen parcial, facilitando la definición del componente inflamatorio de la placa", concluyen Huet y colegas.

Fuente: Molecular Imaging